Emilia de César Sodero. Crítica.

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Se estrena en CineAr la ópera prima argentina protagonizada por Sofía Palomino, recientemente presentada en el Festival de Rotterdam y de Lima.

Sofia Palomino interpreta a Emilia en la ópera prima de César Sodero.

Emilia (Sofía Palomino) vuelve a su pueblo después de muchos años fuera. La ruptura con Ana, su pareja, apuró la decisión. Se instala en casa de su madre y consigue trabajo como profesora de voley en el colegio. Poco a poco, Emilia irá reencontrándose con la gente del pueblo, con afectos del pasado, pero también con las sensaciones que la hicieron emigrar. El pueblo, que a Emilia siempre le pareció un lugar estático y previsible, se transformará en el espacio que le dará una nueva posibilidad de redefinir el sentido de su vida.

A esta altura vale la pena decir que las películas sobre las vueltas al pago del que uno es oriundo constituyen casi un género en sí mismo y Emilia no se aleja de los tópicos clásicos de ese tipo de film. Interpretada por una Sofía Palomino misteriosa e hipnótica, a la que no podremos sacarle la mirada nunca, la protagonista vagará por las calles, se reencontrará con una amiga de la infancia, se reconectará con su madre, se reencontrará con una vieja historia de amor (aunque de amor hay poco, ya que es la pareja de su amiga). Pero a diferencias de otras películas del mismo estilo, a Emilia le falta afecto. Parece encontrarlo en un compañero del trabajo pero el deseo está ausente. El que aparece con Rosario, una alumna de la clase, pero el amor no está. Así Emilia vagará entre noches de alcohol y fiestas buscando algo que tenía pero de lo que huyo por miedo al compromiso. Algo que nos iremos enterando a través de llamadas telefónicas con Ana, su ex pareja.

César Sodero sorprende en su ópera prima, Emilia es un film de sensibilidad directa y emociones sin subrayados ni redundancias. Una película noble y nada complaciente apoyada sobre un trabajo visual con los paisajes y el clima que sirven para potenciar la sensación de descontención y desolación que invade a la protagonista.

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