Diecisiete años después de la emisión del último capítulo de la sitcom, los actores se reunieron para un especial que se emitió en HBO Max.
Se puede discutir si es la mejor de la historia, si es mejor Senfield o 30 Rock, si la estiraron demasiado o no. Pero lo que queda al margen de todo debate es la importancia de Friends dentro de las comedias de situación. Durante diez años la comedia ha sido la más exitosa de todas las que se emitían en ese momento. Confieso que arranqué a verla a partir de la segunda temporada, pero desde ese momento cada martes a las 20:30 estaba sintonizando el canal Sony en un principio (luego se mudó al Warner) para ver un capítulo nuevo de los seis amigos de New York (Ni hablar la decepción cuando daban uno repetido). Mónica, Phoebe, Rachel, Joey, Chandler y Ross formaron parte de una parte importante de mi vida durante los nueve años que seguí la serie. Por suerte, luego de finalizado se emitían todas las temporadas en loop y uno podía volver a verlos. Así, la serie quedó inscripta en el lugar de privilegio que gozan algunas producciones televisivas como La Niñera, Los Simpsons, El Super Agente 86, El Chavo, Los Tres Chiflados o Alf (quizás me olvide de alguna pero estas son las que yo veo cada vez que puedo), programas de televisión que uno puede volver a disfrutar incontadas veces.
Diecisiete años después el esperado momento del reencuentro se concretó. Courtney Cox, Lisa Kudrow, Mathew Perry, Jennifer Aniston, Matt LeBlanc y David Shwimmer se pusieron de acuerdo para juntarse nuevamente en un programa de televisión. Con dispar éxito en sus proyectos posteriores, algunos más otros menos, accedieron a la petición de millones de fans de la serie para que vuelvan a trabajar juntos. Ese encuentro se proyectó el 27 de mayo por HBO Max (acá lo podremos ver una vez que desembarque la plataforma el 29 de junio). Conducido por James Harden, los actores se juntaron en el célebre sillón delante de la fuente donde fue grabada la presentación con la clásica canción I’ll Be There for You de The Rembrandts.
El especial comienza con la llegada de ellos al set de grabación donde se encontraba armado cada una de las clásicas locaciones de la serie. El departamento de Mónica, el de Joey y Chandler, el café Central Perk; cada uno de esos espacios sirven para rememorar los mejores momentos de la serie. Con una recreación clásico capítulo donde se Mónica y Rachel pierden el departamento en un juego de preguntas y respuestas sobre las vidas de cada uno, hacen un repaso por momentos de la serie. El doble de manos de Las Vegas, el Sr.Henckles (vecino de abajo) y la aparición de Richard Burke (Tom Selleck) funcionan como elemento para recordar momentos inolvidables de la serie. Lo mismo que la aparición de celebridades como Reese Whisteerpon, David Beckam e incluso algunos fans de todas partes del mundo, que dan muestra del fanatismo que despertó.
Una vez en el living, los actores hacen un repaso sobre sus sensaciones, como se llevaban ellos, con una confesión que da fuerza a algo que se sospechaba o se respiraba en la serie: el amor entre Jennifer Anniston y David Shwimmer (Rachel y Ross). Ambos confiesan que algo entre ellos existía y que el sentimiento fue canalizado a través de los personajes. Un desfile de famosos (Cara Delevigne, Justin Bieber) con los disfraces clásicos o atuendos clásicos de la serie, un inolvidable momentos musical con Lady Gaga cantando junto a Phoebe el clásico Smelley Cat y un repaso por los textos forman parte de los puntos más altos del especial que cubre mucho de la serie pero que nos deja con ganas de más, ya que muchos inolvidables personajes y momentos quedaron afuera. Igualmente la selección de momentos es buena, para el objetivo del especial, porque la reunión de Friends no solo apela a la nostalgia, también nos permite ver el paso del tiempo y las huellas que dejaron en los actores, con una demostración cabal de la simbiosis que existía entre el elenco, la que dio fruto a una serie inolvidable.