Se estrenó en cines la décima entrega de la franquicia creada por Gary Scott Thompson, protagonizada por Vin Diesel.
Sinopsis:
Durante numerosas misiones más que imposibles, Dom Toretto y su familia han sido capaces de ser más listos, de tener más valor y de ir más rápido que cualquier enemigo que se cruzara con ellos. Pero ahora tendrán que enfrentarse al oponente más letal que jamás hayan conocido: Un terrible peligro que resurge del pasado, que se mueve por una sangrienta sed de venganza y que está dispuesto a destrozar a la familia y destruir para siempre todo lo que a Dom le importa.
Crítica:
La franquicia de Rápido y furioso ha sido sin restricciones. Desde sus inicios, ha sabido combinar la clásica trama de «policía y ladrón que se convierten en improbables amigos» con un toque del cambio de milenio, que la ha convertido en algo llamativo. Desde aquellos días en los que se robaban contenedores llenos de reproductores de DVD, sus han enfrentado todo tipo de amenazas y peligros, desafiandose a sí mismos y a sus vehículos hasta límites absurdos. Esa es la esencia de Rápidos y Furiosos X, el inicio del final de la larga serie de películas.
En esta entrega, se destaca la interpretación de Jason Momoa como Dante Reyes, el hijo del villano Hernán Reyes que conocimos en Rápidos y furiosos 5in control. Dante es un criminal sádico y desquiciado que regresa con sed de venganza contra Dominic Toretto (Vin Diesel) por haber arruinado su vida. Sus planes dispersan rápidamente a Dom y a sus aliados por todo el mundo, desatando una serie de enfrentamientos en América del Sur. Momoa compone un villano magnético y entretenido, de los mejores que ha tenido la serie; lleva su personaje al extremo, dándole un aire extravagante, enérgico y colorido, pero siniestro y amenazante, que por momentos recuerda al Guasón de Heath Ledger (salvando las distancias).
La película, dirigida por Louis Leterrier (El Transportador y El Increíble Hulk de 2008), también captura esa energía desbordante, con escenas de acción caóticas pero fluidas, con giros ridículos, momentos geniales y algunas ridículas bromas. Cuando la película se mantiene en esa línea, se destaca. Además, cuenta con nuevos personajes como Tess interpretada por Brie Larson, y el regreso de Cipher interpretada por Charlize Theron y Deckard Shaw interpretado por Jason Statham. Sin embargo, aunque la rivalidad entre Dom y Dante es interesante, los intentos de la película por tocar las fibras emocionales con la muerte de personajes secundarios no tienen el impacto deseado, y los cambios emocionales más significativos quedan un tanto deslucidos. A pesar de esto, Rápidos y Furiosos X ofrece acción desenfrenada que ha caracterizado a la serie y momentos memorables que van a satisfacer a los fanáticos de la saga.