Luego de presentarse en el Festival de Cannes, llega a las salas nacionales la ópera prima del director platense.
Silvia (María Paz Landa) y Andrés (Nicolás del Río) son dos hermanos que viven junto a su abuelo (Chucho Fernández) en una cabaña en el bosque. Jugando en los alrededores de su hogar, casi sin querer, desatan la ira de un espíritu del bosque que buscará compensación por los daños recibidos. Dentro de la casa y con ayuda de su abuelo, quien oculta mucha información del pasado para no aterrar a los niños, deben sobrevivir hasta la llegada del amanecer del ataque de las almas que deambulan en los alrededores del hogar. Con el fuego como aliado principal, enemigo natural del bosque, tratarán de impedir el peligro que los acecha. De forma paralela, con el uso de flashback, vemos los efectos devastadores que transita un cazador (Ezequiel Pache) ante la reciente pérdida de su hijo, que busca justicia dentro del bosque por la pérdida del su amado vástago.
Con una premisa que sugiere más de lo que expone, La Forma del Bosque se presenta como una película donde la trama se cocina a fuego lento. Sin apelar a golpes de efectos ni al impacto sonoro típico del género; apartándose de lo extremo y sanguinario, donde son pocos los momentos donde la presencia disruptiva del terror aparezca para hacernos sobresaltar. Acá está omnipresente y se esconde en su mayor parte bajo ese manto verdes hojas y gigantes árboles que habitan el frondoso bosque. Recién toma forma corpórea cuando se presenta en el furioso hombre que busca cobrar venganza por su hijo muerto o en la aparición de la mujer (Magui Bravi) que se pasea por el bosque. De esta forma, Gonzalo Mellid parece tomar conceptos clásicos del género encontrando claras influencias de clásicos como Evil Dead de Sam Raimi, pero también elementos del terror contemporáneo como The Witch de Robert Eggers, con elementos de fábula literaria sobre los miedos que habitan en el bosque que parecen salidos de un cuento de los hermanos Grimm.
La cuota de erotismo y seducción la pone Magui Bravi interpretando al espíritu que deambula por el bosque tratando de cobrar venganza y continuar con la maldición hacia todos aquellos que atenten contra la naturaleza. La actriz platense sorprende nuevamente en esta beta scream queen, luego de protagonizar The 100 Candles Game bajo la batuta de otro histórico del género, como Nicolás Onetti (acá productor). En contraposición, la presencia de los niños le imprimen a la historia elementos de Poltergeist de Tober Hopper, con una niña con poderes y su hermano que tratarán de sobrevivir de los espíritus que acechan en el bosque.
Su austeridad, la imaginación con la que logra mezclar todas sus influencias, hacen de La Forma del Bosque una obra compleja que logra su cometido: sumergirnos en el hipnótico bosque, reflexionar sobre el medio ambiente, el dolor y la pérdida. Una película de género que, aunque tome ideas prestadas, tiene identidad propia en el relato y en la presencia de Chucho Fernández, un referente del cine de género nacional. Un auspicioso debut del platense Gonzalo Mellid como director, que nos obliga a seguir atento a sus próximas producciones.
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