[RESEÑA] El Nido de Mattia Temponi

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Se estrena en cines la coproducción italo-argentina protagonizada por Luciano Cáceres y Blu Yoshimi.

El Nido (Italia-Argentina/2021). Dirección: Mattia Temponi. Guión: Gabriele Gallo, Mattia Puleo y Mattia Temponi. Elenco: Luciano Cáceres y Blu Yoshimi. Fotografía: Stefano Paradiso. Vestuario: Francesca Leondeff. Música: Julián Vat. Duración: 92 minutos. Distribuidora: 3C Films. Apta para mayores de 13 años con reservas.

El Nido es un hermético bunker bajo tierra que funciona como refugio para afrontar el «apocalipsis», ideado de manera tal que quienes se vean obligados a usarlos sientan que «están de vacaciones» (así reza la publicidad inicial). Allí se despierta Sara (Blu Yoshini), una joven de solo dieciocho años que fue atacada por una especie de zombie, no recuerda nada y teme haber sido secuestrada. Su captor, Ivan (Luciano Cáceres), un voluntario de mediana edad que afirma haberla rescatado, que ella está infectada y que el tiene la medicina para contener el virus que habita en su cuerpo y que convertido a las personas en bestias salvajes e irracionales a los humanos. Encerrados en el refugio ambos deberán relacionarse y sobrevivir con los pocos recursos que quedan, pero ¿Dónde vive el verdadero terror?. Dentro del claustrofóbico lugar o en exterior. Sara deberá decidir si le cree a su inquietante y obsesivo samaritano, o se arriesga a escapar.

Heredera de la mítica serie La Dimensión desconocida o de películas más recientes como Avenida Cloverfield 10, El NIdo es el primer largometraje de Mattia Temponi (nacido en Turín, Italia), quien debuta con un filme que arranca como un claustrofóbico e inquietante ejercicio fílmico sobre la confianza pero que tras un giro argumental deriva en una situación que funciona como metáfora sobre la violencia machista. Luciano Cáceres compone a Ivan, quien arranca como una persona solidaria y voluntariosa que ayuda a Sara, pero poco a poco se irá transformando en un ser obsesivo y violento, que, una vez que ella vaya recuperando su salud y no dependa más de él, la obligará a quedarse encerrada.

Thriller psicológico o drama pos apocalíptico con personajes al límite, El Nido es un poco de todo eso; un guión con solo dos personajes encerrados en una sola locación hacen que su suspenso, enigma y dudas se apoyen en actuaciones que tocan el límite de lo interpretativo, en escenas de un misterio claustrofóbico que convierten a ese búnker en un espacio asfixiante; dando como resultado final un interesante ensayo de la asfixia, con logrados planos de interiores, luces mortecinas y parpadeantes, pero sobre todo ingenio, para hacer del thriller un juego que lleva al espectador a cuestionarse el lugar de los protagonistas.

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