Se sumó al catálogo de Netflix, el segundo largometraje del director argentino, creador de la serie La Frecuencia Kirlian.
Luego de sorprender con su ópera prima, Historia de lo Oculto, Cristian Ponce vuelve al ruedo con Abrazo de Madre, una coproducción entre Brasil y México. Esta vez, el talentoso director nos sumerge en un thriller psicológico que combina el terror sobrenatural con una cuidadosa construcción de atmósfera claustrofóbica.
La historia sigue a Ana (interpretada por Marjorie Estiano), una bombera que vuelve al servicio tras una inactividad forzada por un traumático evento. Sin embargo, su regreso se ve marcado por la desconfianza de sus colegas y la inexplicable atracción de Mourão (Rafael Canedo) hacia ella. Pronto, un llamado de emergencia a una residencia de ancianos desata una serie de sucesos inexplicables que transforman la misión de rescate en una lucha por la supervivencia.
Además del talento indiscutible de Marjorie Estiano (Aún Estoy Aquí de Walter Salles y Entierra a tus muertos de Marcos Dutra), Abrazo de Madre también cuenta con el argentino Javier Drolas (Medianeras, Los que vuelven y Las Buenas Intenciones), quien interpreta al encargado de una especie de asilo. La recientemente fallecida Ángela Rabello da vida a la siniestra dueña del inmueble.
Escrita por Gabriela Capello, André Pereira y el propio Ponce, la película entrelaza el presente de Ana con recuerdos perturbadores de su infancia en 1973, revelando cómo su relación conflictiva con su madre ha dejado una cicatriz profunda que la persigue. Estos eventos, aparentemente aislados, encuentran su clímax en un manicomio abandonado durante una feroz tormenta, donde los horrores de su pasado toman forma y acorralan tanto a la protagonista como al espectador.
La película se destaca por su ambientación oscura y la caracterización del elenco secundario, quienes aportan realismo a la trama. Además, Ponce continúa su estilo característico, ya visto en Historia de lo culto, al mezclar elementos históricos en su narrativa. Aquí, las inundaciones que golpearon a Río de Janeiro en 1966 y 1996 funcionan como puntos de conexión emocional y de conflicto entre Ana y su madre, quienes casi perecieron en un incendio durante la primera inundación, un trauma que ahora persigue a Ana mientras lidia con los eventos sobrenaturales de su presente.
Con actuaciones destacadas y un audaz enfoque, Abrazo de Madre es otra muestra del talento del argentino Cristian Ponce, esta vez filmando en Brasil, logrando dar forma a un sólido film que también funciona como escalofriante recordatorio de que las heridas de la infancia pueden transformar la realidad en un auténtico infierno.