Se estrena en cines la ópera prima filmada en Tierra del Fuego, ganadora del premio al Mejor Guión en el Festival Cineuropa de Santiago de Compostela.
La Chica Nueva (Argentina-2022) Dirección: Micaela Gonzalo. Reparto: Mora Arenillas, Rafael Federman, Jimena Anganuzzi, Luciano Cazaux, Laila Maltz, Marta Salinas, Juliana Simones, Stella Maris Maidana, Mariela Gutierrez Guión: Micaela Gonzalo, Lucía Tebaldi. Asistente de Dirección: Sabrina García. Producción: Eva Lauría. Compañía Productora: El Ojo Extraviado Cine. Dirección de Arte: Mirella Hoijman. Fotografía: Federico Lastra. Montaje: Valeria Racioppi. Vestuario: Julián Rúgulo. Música: Fernando Bergami. Sonido: Nahuel Palenque. Duración: 78 min. Distribuye: Santa Cine. Salas: Gaumont – Multiplex Belgrano – Showcase Belgrano – Cinépolis (Pilar, Avellaneda) – Multiplex Palmas del Pilar – Hoyts (Unicenter, Quilmes) – El Cairo (Rosario) – Cine Universidad Mendoza – Cine Municipal Teatro Manuel Belgrano (Rafaela) – Centro Cultural José Hernández, Rawson (Chubut) – Cine Teatro Italia, Puerto San Julian (Santa Cruz).
Jimena (Mora Arenillas) se encuentra viviendo en la calle tras el fallecimiento de su madre y decide ir a visitar a Mariano (Rafael Federman) , su «hermano», que vive en Río Grande, Tierra del Fuego. Allí consigue un puesto de trabajo en una fábrica de móviles que exige cada vez más a unos trabajadores cansados, que llevan meses explotados y con un salario mínimo.
Mariano, en oposición a ella, tiene otros planes: un jóven que tiene todo lo que ella no tiene y quiere más. Por eso se dedica a robar mercadería de la fábrica para hacerse un dinero extra para poder abrir su propia importadora; JImena, casi por obligación, se sube al negocio para poder cumplir su sueño de tener una peluquería. Todo ello en el contexto laboral de una fábrica donde los trabajadores deciden ir a una huelga para recuperar los derechos que le fueron arrebatados.
Bajo esa premisa, Micaela Gonzalo construye un relato realista que funciona como una crítica al capitalismo despiadado; el que somete a los trabajadores a esclavizarse y a corroperse por la necesidad urgente de cumplir sus deseos. La directora logra retratar con momentos de conflicto y tensión, sumados a otros de tiernos vínculos entre los protagonisras, como las relaciones se van rompiendo a medida que las necesidades económicas y la explotación laboral avanza. Reclamos, peleas entre compañeros, solidaridad, amistad; todo un combo de distintas formas de interrelacionarse con el dinero como eje central que marca el ritmo.
Reforzada por la potente actuación de Mora Arenillas en el papel de Jimena, quien con sus gestos y sus silencios logra transmitir cada una de las sensaciones de un personaje víctima del sistema y certera a la hora de abordar un tema tan complejo, La Chica Nueva es una película que funciona como espejo del momento actual de la Argentina y que, en el marco del frío sur argentino reflexiona sobre la clase trabajadora y de como el individualismo o el «sálvese quien pueda» termina por debilitarla