Se estrenó en cines la secuela de la película de 1996 dirigida por Jan De Bont y producida por Steven Spielberg.
Protagonizada por Helen Hunt y Bill Paxton, Tornado (Twister), sorprendió a los espectadores con su innovadora representación de tornados. Ahora, 28 años después, llega una especie de «secuela» o «reinicio» que ha justificado la larga espera con un impresionante espectáculo visual, personajes carismáticos y una trama que, aunque simple, cumple su propósito.
La película abre con una emocionante secuencia en la que un grupo de cazadores de tormentas de Oklahoma, liderados por la perspicaz Kate (Daisy Edgar-Jones), pierde de vista un tornado en un cielo amenazante. La catástrofe que sigue deja profundas secuelas. Cinco años más tarde, Kate trabaja rastreando patrones climáticos desde un escritorio en Nueva York. Su vida cambia cuando Javi (Anthony Ramos), un antiguo colega, la convence para unirse a su nuevo equipo en Oklahoma, donde una serie de tornados promete nuevas oportunidades de estudio.
Más que una simple continuación, Tornados se presenta como un reinicio. El único «personaje» que regresa es Dorothy, el dispositivo científico diseñado para analizar los tornados. Kate y Javi se enfrentan a otros cazadores de tormentas, incluyendo un carismático y arrogante Tyler Owens (Glen Powell), quien compite por atraer a sus millones de seguidores en YouTube. Al igual que el personaje de Helen Hunt en la película original, Kate está atormentada por recuerdos dolorosos. Aunque la nueva película intenta profundizar en los traumas de sus personajes, a menudo cae en clichés y frases simplistas.
Pero el director Lee Isaac Chung maneja los ritmos de los personajes con gracia, conservando el corazón y las emociones humanas que caracterizaron su trabajo anterior, Minari (2020), capturando la cultura rural estadounidense con música country y escenas de rodeo, así como paisajes abiertos y un enfoque en las comunidades locales. Estos elementos enriquecen la película, preparando al público para las impresionantes secuencias de tornados que siguen. La cámara de Chung captura la majestuosa y aterradora belleza de los tornados, mientras la tecnología avanzada permite efectos visuales que superan con creces a los de la película original, haciendo de las nubes en forma de embudo una presencia fascinante. En conclusión, Tornados combina el encanto de sus personajes con el asombroso poder de la naturaleza, ofreciendo una experiencia cinematográfica emocionante y visualmente impactante.